¿Por qué innovar?

En un mercado global, la innovación es una herramienta fundamental para diferenciarse de la competencia. La pugna por la misma porción del pastel de los clientes se ha hecho más complicada en las últimas décadas, ante el aumento de una oferta que no conoce fronteras. Por ello, hay que apostar por la innovación como forma, ya no solo de conseguir la fidelización de los clientes actuales, sino también y, sobre todo, como modo de atraer nuevos. El alto grado de competitividad del mercado dinámico global hace que las empresas no puedan estancarse ni dejar de innovar para mantener el interés del cliente.