Editorial 5 de junio 2014

Ayer se renovaron los contratos de no exigibilidad –o standstill– con nuestros acreedores financieros para continuar las conversaciones negociadoras que tienen como objetivo la consecución de un acuerdo de reestructuración de la Compañía. Este nuevo plazo termina mañana viernes por la noche.  

Nuestros esfuerzos siguen persiguiendo obtener las mejores condiciones para la Compañía, que permitan a nuestro proyecto desplegar todo su potencial, a la vez que preservar su singularidad, manteniendo la apuesta por la profesionalidad del sector, la cooperación con los gobiernos en el diseño e implementación de regulaciones eficientes, y la gestión responsable de la actividad.

Este proceso está siendo especialmente complejo al tener como interlocutores a un grupo heterogéneo de acreedores con intereses diversos, lo que dificulta conseguir apoyo suficiente a cualquier propuesta.

Por otro lado, para dar un mayor seguimiento a los resultados del primer trimestre de 2014, esta semana introducimos como reportaje un vídeo de nuestro Director Financiero Corporativo, Ángel Corzo, en el que repasa minuciosamente la contribución de cada unidad de negocio a los resultados globales del Grupo. Creemos que la comprensión de la evolución de los mismos es un activo muy relevante para todos los colaboradores de la Compañía.

A pesar del negativo comportamiento de la unidad de negocio mexicana –como consecuencia del cierre de 8 salas, la intensificación de la competencia, la depreciación del peso mexicano, así como la regulación anti-lavado–, cabe destacar el interesante cambio de tendencia de los últimos meses. Desde noviembre, los ingresos están creciendo, lo cual respalda el enfoque con el que nuestra organización está gestionando la estrategia competitiva en este mercado.