La semana pasada la Compañía publicó los resultados financieros correspondientes al segundo trimestre del año acabado el 30 de junio. Estos resultados muestran ciertos efectos positivos derivados de los esfuerzos que venimos realizando como organización en los últimos tiempos en todas las unidades de negocio.
Como señala Oscar Iglesias en el vídeo, hemos aumentado un 25% la facturación del trimestre con respecto al año 2014, alcanzando una cifra de 409 millones de euros. El EBITDA ajustado –que excluye partidas no recurrentes relacionadas con la reestructuración financiera– asciende a 66,4 millones de euros, mejorando las previsiones que habíamos comunicado al mercado y superando la cifra del mismo periodo del año anterior en un 49%.
Durante este trimestre, aunque es verdad que nos ha favorecido el tipo de cambio en varios países, merece la pena destacar que, a pesar de las limitaciones de nuestra capacidad de inversión, en moneda local hemos crecido los ingresos en todos los países con la salvedad de España –que se ha mantenido por la racionalización de la línea tradicional de máquinas.
Hemos pasado el ecuador de un año marcado por el final de la reestructuración financiera que devolverá a la Compañía su capacidad histórica de inversión. En este sentido, continuamos con la agenda estratégica que está definiendo los planes para liderar el futuro del sector en todos los mercados en los que operamos.
Por otro lado, hoy mismo, hemos comunicado en un Hecho Relevante a la CNMV el inicio del proceso del Scheme of Arrangement, un proceso judicial ante los Tribunales competentes de Reino Unido que ha iniciado Codere con la finalidad de facilitar el proceso de reestructuración financiera. El scheme permitirá convocar una reunión de los tenedores de los bonos de Codere con el fin de validar todos los acuerdos que ya se han tomado entre la Compañía y la casi totalidad de los bonistas, de forma que sean de obligado cumplimiento para la totalidad de los tenedores de bonos.
(2 septiembre 2015)
