La pasada semana se incorporó al equipo de Codere, como directora corporativa del área Legal, Sagrario Fernández Barbé, que estará además a cargo de las áreas corporativas de Cumplimiento y Protección de Datos, y que coordinará asimismo, junto al director de Personas, Álvaro de Ansorena, el departamento de Comunicación Corporativa.
De esta manera, cubrimos finalmente una importante posición que quedó vacante el pasado mes de marzo, tras la salida del anterior responsable, lo que sin duda nos ayudará en el avance de nuestro proyecto de transformación, que en este momento supone la revisión, por parte de las distintas direcciones, de cada una de las áreas, tanto a nivel corporativo como de las filiales.
Por otro lado, se ha producido también recientemente la salida voluntaria de nuestro COO de Plataforma y director de Tecnología de la Información, Felipe Ludeña, que seguirá colaborando en cualquier caso con la compañía, si bien las áreas que le reportaban pasarán ahora a depender de la oficina del CEO y de la Dirección de Administración y Finanzas liderada por Ángel Corzo, respectivamente.
Continuamos mientras tanto con el desarrollo de nuestra estrategia online, que está implicando la constitución de una filial de la compañía en Malta, el traslado de parte de nuestra actividad a Melilla y la puesta en marcha en Israel de una sociedad en la que ya trabajan doce personas. Un equipo que desempeña su labor de manera conjunta con los responsables regionales para el desarrollo de nuestra estrategia onmicanal.
Además, estamos preparando ya la agenda de un encuentro del equipo directivo que tendrá lugar en Madrid este mes de septiembre, que entre otros temas contempla el debate para la definición de la visión y valores de la compañía, la revisión del estatus de las distintas avenidas de transformación, así como la realización de un workshop sobre innovación digital.
Mencionar por último la complicada situación económica en Argentina, obviamente una de las principales preocupaciones de nuestro equipo directivo en la actualidad. La compañía enfrenta las consecuencias de un mercado local recesivo y debilitado por la fuerte devaluación de su moneda y la creciente tasa de inflación y, en este contexto, estamos tomando las medidas necesarias para sostener nuestros ingresos a los niveles inflacionarios y tratar de paliar la situación, ya que nuestras previsiones no contemplan un cambio de tendencia al menos hasta 2019. Por el momento, y a pesar de estas dificultades macroeconómicas, Codere ha sabido mantener su cuota de mercado y ha aumentado su EBITDA en el país (en moneda local) y de manera global, gracias a la resiliencia de nuestro negocio y a los grandes esfuerzos de cada uno de nosotros por implementar de manera eficaz nuestro proyecto de transformación, mejorar la eficiencia y maximizar nuestra productividad.
Vicente Di Loreto, director general del Grupo Codere
(5 de septiembre de 2018)
